Difícilmente es una coincidencia que el café y el té se hayan puesto de moda precisamente cuando las primeras fábricas se instalaron durante la Revolución Industrial. El uso ampliamente extendido de las bebidas con cafeína —que reemplazaron a la habitual cerveza— facilitó la gran transformación de la economía agrícola a la industrial.
Hervir el agua para preparar café o té contribuyó a disminuir la incidencia de enfermedades entre los trabajadores en las ciudades densamente pobladas. Y la cafeína en sus sistemas les ayudó a no quedarse dormidos frente a las máquinas. En cierto sentido, la cafeína es la droga que ha hecho posible el mundo moderno.
Además, cuanto más moderno se torna nuestro mundo, parece ser que la necesitamos más.
Sin ese tarro útil de café —un refresco de cola o una bebida energizante— que nos saque de la cama para trabajar, la sociedad de 24 horas del mundo desarrollado no existiría. Los científicos han desarrollado diversas teorías para explicar el poder “para despertar” de la cafeína. El consenso se concentra hoy en día en la interferencia de la droga con la adenosina, una sustancia química del cuerpo que actúa como una píldora natural para dormir.
La cafeína bloquea el efecto hipnótico de la adenosina y evita que nos durmamos. Ya que se ha demostrado que la cafeína, en cantidades moderadas, también intensifica los estados de ánimo y aumenta la agudeza, es una bebida potente para los estudiantes y los académicos que permanecen en el laboratorio hasta las tres de la mañana.
martes, 11 de marzo de 2008
La cafeína, la droga psicoactiva más popular del mundo
Publicado por :
Ing. Alfredo Gonzalez
Etiquetas: Salud
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